El derrame de 40 mil metros cúbicos de lixiviados de sulfato de cobre acidulado en los ríos Bacanuchi y Sonora fue causado por las malas condiciones en que estaba un tubo de polietileno en una de las piletas, así como por la falta de una válvula de la empresa minera Buenavista del Cobre —subsidiaria de Grupo México—, no por el exceso de agua resultado de las lluvias, como aseguró la empresa en un principio, lo cual es “completamente falso”, señaló ayer el secretario del Medio Ambiente (Semarnat), Juan José Guerra.
Confirmó también que se prepara una demanda por responsabilidad ambiental en contra de Grupo México, juicio en el cual no sólo iremos a solicitar la multa mayor, que es de aproximadamente 40 millones de pesos o 600 mil salarios mínimos, sino lo más importante: comprobar el daño y su cuantificación para obligar a la empresa a la reparación o compensación de los daños causados”.
Agregó que, “de acuerdo a estimaciones, lo que solicitaremos al juez de distrito que conocerá de esta demanda por responsabilidad ambiental, el costo de la remediación pudiera llegar a considerar miles de millones de pesos”.
Guerra Abud dio conferencia de prensa junto con los titulares de la Procuraduría Federal de Protección del Ambiente (Profepa), la Comisión Nacional del Agua y la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios, en la cual presentó un informe de las acciones realizadas por el gobierno federal para atender el derrame producido el pasado 6 de agosto.
Dijo que la empresa minera ha argumentado de manera pública que los hechos se dieron por las lluvias por arriba de la media, no obstante, “los reportes del Servicios Meteorológico Nacional (SMN) demuestran que esto es absolutamente falso”.
Guerra Abud se apoyó de diversas fotografías de la zona afectada, y puntualizó que la tinaja de almacenamiento que falló no contaba con la válvula para casos de un derrame.
En la presentación del Informe, refirió que con el derrame directamente hacia el arroyo Tinajas, este hecho se convirtió en “el peor desastre ambiental de la industria minera del país”.
Recordó que se presentó ya una denuncia penal contra quien resulte responsable de la contaminación, en la cual está trabajando la PGR, y abundó:
“Los procedimientos ya iniciados son independientes al que estamos intentando a través de un juicio por responsabilidad ambiental, por la indebida construcción de patios de lixiviados. Seguramente habrá sanciones que puedan llegar hasta los 50 mil salarios mínimos; pero en el tema de responsabilidad ambiental no sólo iremos a solicitar la multa mayor que es de aproximadamente 40 millones de pesos o 600 mil salarios mínimos, sino lo más importante es comprobar el daño y su cuantificación para obligar a la empresa a la reparación o compensación de los daños causados”, precisó.
Sin embargo, y pese a la magnitud del daño ambiental, Guerra Abud dijo que la empresa no puede ser clausurada, ni siquiera obligada a suspender operaciones de manera temporal.
En este caso, la medida que se ha adoptado, dijo, es “cerrar el área donde se desbordaron los residuos, en tanto que en caso de que proceda a retirar la concesión, eso es facultad exclusivamente de la Secretaría de Economía, ya que no se puede frenar la actividad económica… cuando se cumple con las normas ambientales. Lo que sucedió es que tuvieron un descuido que causó el daño ambiental, (pero) el país tiene que crecer económicamente, aunque no vamos a permitir que una empresa deje de ser sancionada en los términos que marca la ley”.
Mina buenavista del cobre
Hay 22 mil personas afectadas por los residuos tóxicos vertidos en los ríos Bacanuchi y Sonora; cinco fueron hospitalizados: Cofepris
Mikel Arriola, titular de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), dio a conocer que cinco personas —cuatro hombres y una mujer— presentaron “intoxicaciones” en días posteriores al derrame de materiales tóxicos a los ríos Bacanuchi y Sonora, mismas que después de ser atendidas fueron dadas de alta de su atención hospitalaria.
Detalló que los afectados por estos derrames fueron hospitalizados debido a que presentaban náuseas, sudoración, dolor gástrico y debilidad de leve a grave.
Al presentar los resultados de las investigaciones de la dependencia a su cargo a raíz del referido derrame de sustancias tóxicas, precisó que se ha efectuado 54 muestras de agua, de las cuales 18 resultaron dentro de la norma, 33 fuera de norma y existen 13 resultados pendientes.
Ante ello, se resolvió cancelar de manera transitoria los 33 pozos que se encontraron fuera de norma para la potabilización del agua para el consumo humano.
Asimismo, reportó que alrededor de 22,000 personas se han visto afectadas en siete municipios por el derrame de residuos tóxicos de la minera Buenavista del Cobre, por la contaminación del río Bacanuchi, la cual se dispersó hacia otros afluentes de ese río.
La contaminación ha provocado escasez y en algunos casos desabasto de agua, por lo que los afectados han tenido que ser abastecidos con pipas de agua potable.
Y entre otras acciones implementadas, se han visitado 1,101 viviendas, se han entrevistado a tres mil 521 personas y entregado más de mil sobres de Vida Suero Oral.