Ejidatarios de la Sierrita de Galeana, en el municipio de Tlahualilo, Durango, solicitaron el Tribunal Agrario del Distrito Sexto con sede en Torreón, Coahuila, que emita una resolución justa, apegada a la ley, relacionada con el conflicto que tienen con la empresa Excellon de México, derivado del incumplimiento de contrato, que ha provocado, entre otras cosas, daños al ecosistema, como la deforestación de varias hectáreas, sin que se ponga freno a esta situación.
"En este momento, el proceso jurídico o la demanda se encuentra para dictar sentencia desde febrero pasado. Ahí tenemos otra dilación por parte del tribunal", explicó Juan Antonio López, coordinador del Área de Justicia Transnacional en el Proyecto de Derechos Económicos Sociales y Culturales (Prodesc), organización que los ha apoyado.
"Los ejidatatrios esperan que el tribuna se pronuncie y dicte una sentencia totalmente apegada a derecho. No piden que se les dé más, sólo lo que el derecho les otorga, solicitan una sentencia totalmente apegada a derecho y que la misma se base en los más altos estándares de derechos humanos", dijo.
Expuso que existe una gran problemática en todo el país con estas empresas transnacionales, por eso hay varias protestas de los ejidos afectados por Excellon.
"Las minas siempre llegan con mentiras, con engaños, queriendo abusar de los ejidatarios y comuneros, porque no nos ven como iguales, sino como (si fuera) un favor ponerles una mina ahí, al pagarles unas migajas, que es lo que podríamos decir que les dan, porque lo que ellos sacan, y el valor real de estas tierras, no es equiparable a lo que pagan las empresas mineras", insistió.
Reconoció que en el caso específico de La Sierrita, aunque la empresa minera cumplió con las cláusulas económicas y pagó la renta que se había estipulado, no les dio todo lo que los ejidatarios pedían, que era parte de lo que ellos necesitaban para tener un mejor desarrollo. "Por ejemplo pedían que se pusiera una planta tratadora de agua para el líquido que sale del laboreo de la mina", señaló.
Daniel Pacheco, presidente del Comisariado Ejidal de La Sierrita de Galeana, detalló que el ejido fue constituido por resolución presidencial en 1980 y cuenta con 127 ejidatarios. Se encuentra muy cerca de importantes yacimientos de plata, plomo y zinc, recursos que actualmente son explotados en la región, lo que ha dado como resultado graves violaciones a los derechos humanos de los propietarios por parte de la industria extractiva.
Recordó que en 2004 la mina La Platosa, perteneciente a Excellon de México, S.A. de C.V., filial de la canadiense Excellon Resources Inc., comenzó sus operaciones tras acordar con el ejido de La Sierrita de Galeana la renta de cuatro hectáreas de tierra de uso común por un Millón 200 mil pesos por 30 años, pero al momento de firmar el contrato se estipuló por 27 hectáreas y por el mismo precio. "Con amenazas y engaños, la empresa logró que los ejidatarios firmaran el contrato", señaló.
Citó que a falta de diálogo con la compañía, a principios de 2008 los ejidatarios decidieron realizar una manifestación pacífica afuera de la mina. Tres meses después lograron un acuerdo con la empresa y firmaron un contrato de ocupación temporal por la renta de mil 100 hectáreas, en el que se establecieron importantes clausulas de carácter económico, social y medio ambiente en beneficio del ejido, mismas que no fueron cumplidas.
El 8 de julio de 2012, continuó, los ejidatarios decidieron nuevamente iniciar una manifestación pacífica permanente afuera de la mina, puesto que la empresa realizó trabajos de exploración en territorio no convenido sin autorización de la asamblea ejidal, entre otras irregularidades.
Comentó: "El 29 de agosto de 2012, un centenar de elementos del Ejército, de la policía federal y de la municipal entraron violentamente a La Platosa, intentando desmantelar el campamento pacífico. Para octubre de ese mismo año, la empresa llevó a grupos de choque para desalojarnos violentamente y utilizó maquinaria de la mina para destruir el lugar donde se desarrollaba la manifestación.
"La empresa no accedió al diálogo, y fue a partir de esa negativa que la asamblea general de ejidatarios decidió presentar una demanda de recesión del contrato de ocupación temporal, la consecuente restitución de sus tierras y el resarcimiento de los daños", relató Daniel Pacheco.
Denunció que en fechas recientes, en el marco de que el tribunal dicte sentencia, han regresado las amenazas, que hace dos o tres años se intensificaron, para que no sigan el pleito legal.
Señaló: "Como desde 2013, a partir de que comenzamos a insistir a que se cumplieran los acuerdos, sobre todo la Secretaría de Gobierno (local), comenzó a presionar para que dejáramos las cosas así y que dejáramos trabajar a la empresa. Tuvimos incidentes de inseguridad. Somos como 130 habitantes, son alrededor de 30 casitas, Y ahora que estamos en etapa de sentencia, también hemos empezado a recibir llamadas y amenazas para que dejemos en paz a Excellon", aseguró Pacheco Álvarez.
Resaltó la necesidad de que se cumpla con la ley, por lo que reiteró: "Nosotros creemos que es una buena oportunidad para que el Tribunal Agrario demuestre que las comunidades y los ejidos tienen la oportunidad de acceder a la justicia, y esperamos que se apeguen a los altos estándares de derechos humanos. Tenemos fe de que la solución sea a favor nuestro, eso es lo que estamos esperando".
Original Article: http://www.eluniversal.com.mx/articulo/nacion/sociedad/2016/07/4/ejidatarios-exigen-recuperar-su-tierra
