Minera Frisco, a través de su subsidiaria Minera Espejeras, presentó el Manifiesto de Impacto Ambiental (MIA), requerido por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), para reactivar el trámite de autorización de los trabajos de exploración en yacimientos de oro en el municipio de Tetela de Ocampo.

La firma propiedad de Carlos Slim Helú esperó el cambio de administración federal para presentar el documento que ingresó el 19 de diciembre de 2012, a través de la ventanilla de la delegación Puebla de Semarnat.

Según la Gaceta Ecológica de la Dirección General de Impacto y Riesgo Ambiental (DGIRA) de la Subsecretaría de Gestión para la Protección Ambiental de Semarnat, a la Manifestación de Impacto Ambiental de Minera Espejeras se le asignó el número de proyecto 21PU2012MD070.

La MIA explica que para la exploración en Tetela de Ocampo se pretenden hacer 27 perforaciones por medio de dos tipos de barrenación: inversa y diamante. También se destaca que las exploraciones de Minera Espejeras se desarrollarán en cuatro predios que son: “Los Conejos”, “El Juarezco”, “San Antonio” y “El Carmen”.

Las cuatro áreas donde se harán perforaciones para conocer el volumen disponible de oro son propiedad de Minera Espejeras y se ubican en la localidad conocida como “La Cañada”.

Con la presentación de la MIA, Frisco –a través de Minera Espejeras– retoma el proyecto minero que en agosto de 2012 pareció cancelarse por completo debido a la negativa de la Semarnat para autorizar los trabajos de exploración y por la oposición social ante el riesgo de contaminación del agua y la devastación forestal.

La Semarnat, durante el cierre de la administración de Felipe Calderón, rechazó el primer informe preventivo presentado por Minera Frisco argumentando que el proyecto minero “no se ajusta a lo dispuesto por los artículos 31 fracción I de la LGEEPA y 29 fracción I del REIA”.

El resolutivo con folio S.G.P.A./D.G.I.R.A./D.G./6474 y fechado el 17 de agosto en México, Distrito Federal, precisó que si la empresa deseaba continuar con el proyecto forzosamente tenía que solicitar a Semarnat el análisis y evaluación de la manifestación de Impacto Ambiental.

Para entonces la Semarnat estableció que si Frisco (Minera Espejeras) no tenía la autorización arriba señalada, la firma “no podrá iniciar obras y actividades de exploración”, y en caso de desobedecer se hará acreedora a sanciones previstas en la Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente.

Vale la pena recordar que la empresa Frisco inició los trabajos de exploración de las minas en Tetela en enero de 2012 y sin autorización de las autoridades federales; la población, al detectar los trabajos, emprendió una campaña para frenar el proyecto y solicitaron –sin aun tener respuesta– que el gobierno de Rafael Moreno Valle declare la zona Reserva Natural.