Por: Jessica Bigio |
CNN Expansión
El conglomerado minero y ferroviario Grupo México, de Germán Larrea, ya participa en el sector energético mexicano.
Su subsidiaria Perforadora México, que compró en 2010 por 240 millones de dólares (mdd), trabaja desde hace 50 años para Pemex. Le renta plataformas marítimas y le ayuda a perforar pozos de petróleo y gas. También ofrece sus servicios geofísicos para que encuentre nuevos yacimientos.
“Si hay una empresa en México que está posicionada para hacer esa transición para operar como petrolera es Grupo México”, dice el socio de la consultora energética Marcos y Asociados, Luis Miguel Labardini, a la edición del 1 de febrero de 2014 de la revista Expansión.
El dinero lo tiene. Su flujo de efectivo en los primeros nueve meses de 2013 fue de unos 3,000 mdd. Representa casi 13% de lo que invierte Pemex en exploración y producción.
“Una empresa con tanto capital es candidata natural para participar en la apertura energética mexicana”, dice el CEO de la consultora minera Candiani Mining, Mauricio Candiani.
En 2013 compró dos plataformas más: Prospector II y Prospector IV. Ambas fabricadas en China.
“Los veo invirtiendo con mucha intensidad en la apertura energética. Mal harían en no aprovechar esta oportunidad”, dice Candiani.
Además, la empresa tiene experiencia solicitando al gobierno federal concesiones para buscar y extraer recursos minerales.
También sabe negociar con los ejidatarios para obtener los permisos necesarios para montar sus minas. Este conocimiento será útil si busca perforar pozos en tierra.
La empresa de Germán Larrea puede aprovechar este conocimiento, así como su experiencia como contratista de Pemex y su capital, para convertirse en una de las primeras operadoras mexicanas independientes, dice el analista de Vector Casa de Bolsa, Julio Zetina.
